El estado judío es líder global en defensa de los derechos humanos en tiempos de terrorismo, y está sirviendo como un ejemplo a otros mientras ese mismo terrorismo continúa plagando el mundo, dijo el prominente ex presidente de la corte suprema israelí Aharón Barak, esta semana, en una entrevista publicada en el periódico hebreo Makor Rishon.
“Me invitaron a la Corte Europea de Derechos Humanos en Estrasburgo y 300 jueces me preguntaron cómo defender los derechos humanos en un período de terror”, dijo el retirado juez Aharón Barak en un evento en la Universidad Hebrea de Jerusalén. “Están perdidos”.
“En Israel -prosiguió-, hemos sido capaces de manejar mejor que otros la forma de proteger los derechos humanos. A pesar que tenemos problemas de seguridad, nosotros – la sociedad israelí, la Knesset y los tribunales – siempre hemos podido reconocer la existencia de estos derechos humanos. Todos los principales fallos de la Corte Suprema han seguido esta línea, y hoy están siendo estudiados en todo el mundo”.
“Hacia finales del siglo XX hubo un enorme florecimiento de los derechos humanos, pero hoy estoy preocupado por el futuro de los derechos humanos en el mundo”, dijo Barak, de 80 años de edad, quien encabezó la Corte Suprema de Israel 1995 a 2006. “Las cuestiones de los refugiados y el terror [tienen] una gran posibilidad de dañar los derechos humanos. Los tribunales constitucionales y supremos [en otros países] todavía no saben cómo tratar con ellos”.
En el mismo evento, el Procurador General del Estado de Israel Avijai Mandelblit estuvo de acuerdo con Barak en que Israel estaba en buena forma en términos de derechos humanos. Pero, destacó Mandelblit, los derechos humanos no tienen precedencia sobre todos los demás valores. “Los derechos humanos no son una receta para el suicidio nacional”, dijo. “Debemos ser equilibrados. Los derechos humanos no siempre prevalecen, pero hay que tenerlos en cuenta”.