La respuesta depende de a quien se le pregunta. Según los palestinos su nación existe desde hace 5,000 años. Los canaanitas, conquistados por Josué en el siglo 13 AEC, eran palestinos. Según el Corán, (Ibrahim – Sura 3:67), Moisés (Musa – Sura 7:143) y los discípulos de Jesús (Sura 5:111) eran musulmanes. En la Conferencia de Madrid de 1991 la Sra. Hanán Ashrawi, legisladora cristiana palestina, declaró que Jesús era palestino, nacido en la ciudad palestina Belén, y que ella, palestina, es descendiente de los primeros cristianos, todos ellos palestinos.
Según los israelíes, los árabes que hoy viven en Israel y en la Cisjordania son, muchos de ellos, descendientes de inmigrantes de los países árabes vecinos que vinieron a Palestina en las primeras décadas del siglo 20 atraídos por las fuentes de trabajo creadas por los inmigrantes judíos. Esto ha sido descrito y fundamentado por la historiadora Joan Peters en su libro Desde Tiempo Inmemorial.
El emperador romano Adriano, después de la fracasada rebelión de Bar Cojba (132-135), cambió el nombre de Judea a Palestina, y de Jerusalén a Aelia Capitolina, para disminuir el vinculo de los judíos con su patria ancestral. “Palestina” desde entonces es una denominación geográfica y no el nombre de una nación o un Estado.
Los árabes de la región no se auto identificaron como palestinos (en el Plan de Partición de noviembre 1947 de las Naciones Unidas y en la Resolución del Consejo de Seguridad # 242 de noviembre de 1967 no se menciona ni una sola vez la palabra “palestinos”). Recién en 1964, cuando la Liga Árabe creó la Organización de Liberación Palestina (PLO), la descripción de árabes como palestinos apareció por primera vez en el preámbulo de la constitución del PLO.